Quiero mirar al futuro sin esperanza en él, sin querer saber que hacer, sólo sabiendo que vendrá, y sentarme a esperarle, y dejarle pasar, sin molestarle. Y no así, rodeada, la tele, ellos, la luz naranja… y ¿me podrán entender? Comprender que lo necesito, que a veces necesito de mi, de mi para mi y dejar de dar a los demás. Necesito mi momento egoísta, para mi sola.
Dejadme en paz por un momento. Yo seguiré estando por aquí, en unas horas volveré, después de haber colocado las fichas que van mezclándose y ocupando espacios que no deben, por que solas no saben encajar y dejan huecos imposibles de llenar.
Creo que nunca parará, que la rueda se ha puesto a girar y no hay manera de pararla. Y cuando pides un respiro alegan que ya te lo han dado, que para que quieres más. Si quieres parar la rueda te tendrás que esforzar, luchar, buscar algo que la haga rodar más despacio. Antes, era el revés, tenías que procurar hacerla rodar, pero ya inercia ya puede con ella, parece que rozamiento ha desaparecido.
Y no es normal, no me digas que esto que me pasa es normal, por que sé que no lo es. Incomprendida, así me siento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario